Descanso de paz en plena naturaleza.
La riqueza medioambiental y paisajística es uno de los bastones más importantes de nuestro Olivar de Sierra. Esto ha hecho desarrollar actividades paralelas como el Turismo Rural para poner en valor nuestra comarca. Alojamientos de máxima calidad en un entorno singular se ofrecen al visitante en donde disfrutará de sensaciones únicas.
En la página web de Olipe, dentro de Cultura Olipe hay un apartado dedicado al Turismo de Los Pedroches. En el colaboramos con los socios y amigos de Olipe para dar a conocer sus viviendas rurales alojadas en el «Valle de Los Pedroches».
Bien entrado el siglo XX, como muchas otras zonas de la península, Los Pedroches se vieron fuertemente sacudidos por la irrupción de la Guerra Civil, siendo una de las Comarcas donde el conflicto alcanzó cotas más severas de dramatismo. En dicha contienda el Encinar llegó a ser habilitado provisionalmente como Hospital de Sangre, y acogió en su interior, ejerciendo necesarias labores de auxilio y cura, a heridos en el frente.
El Encinar Portezuelo adquiere, ya desde sus orígenes, la condición de cortijo emblemático debido a la magnífica gestión de D. Nemesio Muñoz, conocido industrial pozoalbense. Acogió, como era habitual entonces, toda una serie de oficios propios del lugar y la época. Aparceros, gañanes, pastores, porqueros, piconeros o segaores fueron ocupando a lo largo de la historia las paredes de esta peculiar construcción vallesana.
En una penillanura sobre el llamado «Batolito de Los Pedroches», a 718 metros de altitud, una dehesa de encinas centenarias donde pastan tranquilamente caballos de pura raza española, cerdos ibéricos y vacas chairolesas configuran el entorno del cortijo El Encinar. Las labores de rehabilitación desarrolladas por su actual propietario han permitido recuperar la historia impregnada en las paredes y bajo las bóvedas de este cortijo del siglo XIX mantienen latente el espíritu de las casas de campo típicas de la comarca de Los Pedroches. De hecho, su construcción a base de piedra, cal, madera, barro y cerámica, junto con una cuidadísima decoración rústica logra que nos sintamos transportados a una vivienda de época.
Además, su privilegiado entorno vegetal es ideal para realizar todo tipo de actividades como senderismo, paseos en bicicleta o a caballo, escursiones a la sierra, caza, pesca, o visitas culturales a la comarca.
Rodeado de un mar de corpulentas encinas aparece El Cortijo El Encinar-Portezuelo, situado a 6 kilómetros de la localidad cordobesa de Pozoblanco. Un conjunto de dos viviendas en plena naturaleza que invitan a la tranquilidad y sosiego.
Todo el conjunto está dotado de energía eléctrica, calefacción central y agua caliente, lo que nos permite disfrutar de un ambiente tradicional con las comodidades actuales.
El Cortijo El Encinar está compuesto por dos viviendas adosadas, pero independientes. La primera consta de dos estudios con cuartos de baño y cocina-armario, un dormitorio doble con cuarto de baño y un salón chimenea. La segunda cuenta con dos dormitorios, uno doble y otro individual, cocina, cuarto de baño y un salón con chimenea.
La rústica decoración de las casas nos traslada a otra época, a una sociedad eminentemente agraria cuyos elementos autóctonos nos susurran un pasado sin prisas, con una mágica armonía entre lo práctico y lo bello.
Como llegar:https://www.google.com/maps/embed?pb=!1m14!1m8!1m3!1d401138.9623347881!2d-4.793568875906568!3d38.23547082187677!3m2!1i1024!2i768!4f13.1!3m3!1m2!1s0x0%3A0x0!2zMzjCsDE3JzIzLjgiTiA0wrA1MCcwMi4zIlc!5e0!3m2!1ses!2ses!4v1434104008892 https://www.youtube.com/embed/FsxlSSaLllQ